El Oviedo gana al Almería en el minuto 93 con un doblete de Nacho Vidal

La plantilla más cara de Segunda, el Almería, se medía a la quinta, el Oviedo, en la ida de semifinales del playoff de ascenso a Primera. Pero un factor diferencial entraba en juego: los andaluces, que alcanzaron la promoción gracias a los 27 goles del pichichi de la Liga, Luis Javier Suárez, no contaba para la semifinal con su ariete estrella, que se marchó con la selección colombiana para los partidos de clasificación para el Mundial. Su sustituto era Marezi, delantero serbio que solo había disputado 148 minutos en 16 partidos de Liga con cero goles en su mochila. Y se notó la diferencia entre los dos puntas rojiblancos. Los andaluces no tuvieron esa efectividad en ataque y el Oviedo, con dos zarpazos de Nacho Vidal, se impuso en el primer asalto de la semifinal.

Comenzó el Almería dormido el encuentro (como gran parte de este curso) y con un Oviedo que se encomendaba a la magia y experiencia de Santi Cazorla; el desequilibrio constante de uno de los mejores regateadores de la categoría, Hassan; y el olfato goleador de su delantero Alemao. Y esa mezcla de sopor con la electricidad de Hassan acabó con un gol tempranero del equipo de Paunovic. El futbolista nacido en Francia con nacionalidad egipcia encaró en la esquina del área, orientó el balón hacia su pierna izquierda, sacó un zurdazo potentísimo que dejó Fernando muerto en el área pequeña y Nacho Vidal se adelantó a un Edgar adormitado para empujar el balón a la red y poner el 0-1.

Pero no le dio tiempo ni a celebrar el tanto a toda la afición ovetense desplazada al UD Almería Stadium cuando apareció el que se tenía que echar el equipo a la espalda ante la ausencia de Suárez: Sergio Arribas. El canterano del Real Madrid recibió un balón de Marezi en el área, giró sobre sí mismo con un control orientado y, con un poco de suerte al caer en sus pies el rebote de un defensa, sacó un zurdazo al primer palo donde Aarón Escandell no pudo llegar. El partido estaba de nuevo en tablas.

El partido empezó con frenesí y así continuó hasta el descanso, con un ritmo alto y mucha intensidad en los balones divididos. Sin embargo, no se movió el marcador.

El segundo acto comenzó con el conjunto indálico muy arriba presionando la salida de balón de los visitantes. Y en el 49 tuvo el segundo el equipo dirigido por Rubi. A la salida de un córner que forzó después de una buena presión, Melero se elevó más que nadie, remató con fuerza a puerta y cuando se levantaba la grada rojiblanca pensando en que acabaría en gol, apareció in extremis Nacho Vidal para sacar el balón bajo los palos.

El Oviedo reaccionó y comenzó a poner somnífero al partido con el balón ante el empuje rojiblanco. El equipo de Rubi intentaba volver a meter ritmo al juego, pero entre Sibo y Colombatto en el medio, el encuentro siguió el compás que marcaba el conjunto asturiano. Para más inri, otro de los delanteros importantes en el Almería, Leo Baptistao, se tiró al suelo en el 60 tras caer lesionado. Otro problema para el técnico de Vilassar del Mar en la parte ofensiva.

En su lugar entró Lázaro Vinicius y su ingreso metió el miedo en el cuerpo a la defensa del Oviedo. En un centro colgado por Centelles al punto de penalti, el brasileño se impuso en el salto a Dani Calvo y con un giro de cuello espectacular remató de cabeza y estrelló su remate en el poste.

El equipo de Paunovic controlaba el partido e imponía su ley en el juego pensando en el partido de vuelta. Pero cerca del final, Vinicius volvió a tener el 2-1. Una internada de Puigmal por la banda derecha abrió el camino para el brasileño que recibió en el primer palo, disparó y David Costas apareció para birlarle el tanto cuando Escandell estaba vencido. Probó con un arreón final el equipo indálico para irse con ventaja, y cayó en su intento. En el minuto 93, una internada de Paraschiv por la banda izquierda acabó en un centro al punto de penalti para que Vidal marcara su doblete.

La ausencia de Luis Suárez dejó un vacío enorme en el ataque almeriense y para la vuelta se suma la baja de Leo Baptistao. El próximo miércoles (21.00, Movistar), con el Carlos Tartiere como escenario y con el Oviedo con ventaja, se decidirá el primer finalista del playoff de ascenso a Primera.